La reactivación del mercado inmobiliario en la provincia de Buenos Aires quedó reflejada en las cifras de marzo de 2025. Según el Colegio de Escribanos bonaerense, se firmaron 10.317 escrituras, lo que representa un salto del 42% respecto de marzo del año pasado. Además, el uso del crédito hipotecario subió un 430% interanual, en un contexto donde el financiamiento comienza a recuperar protagonismo tras años de estancamiento.
El dato es aún más relevante si se lo compara en perspectiva histórica: marzo de 2025 fue el mejor en 8 años, superado solo por marzo de 2017 (11.954 escrituras) y por marzo de 2012 (10.558).
De acuerdo con datos históricos, también se ubicó como el tercer mejor arranque de año en los últimos 17 años, con un total de 24.018 escrituras en el primer trimestre.
Guillermo Longhi, presidente del Colegio de Escribanos de la provincia de Buenos Aires, sostuvo que «el nivel de actividad notarial creció de forma sostenida desde enero, pero marzo superó todas las proyecciones. Es un resultado destacable, incluso sin estímulos extraordinarios como en otros ciclos de auge».
La cifra de más de 10.000 escrituras es un dato alentador, especialmente porque se alcanzó en marzo, un mes que, estacionalmente, no suele ser el mejor. Sin embargo, la tendencia ya venía siendo positiva desde enero y febrero. Aunque las épocas de calor suelen reducir las operaciones, en 2025 se registraron muy buenos niveles de actividad.

Para Longhi, la recuperación se sostiene sobre tres pilares: demanda postergada, ajustes de precios y reapertura parcial del crédito hipotecario.
El rol crediticio
De las 10.317 operaciones registradas, 1.669 se concretaron con hipoteca, lo que representa el 16,1% del total. Si bien todavía está lejos del pico alcanzado en 2018 —cuando el crédito explicaba el 44% de las compraventas—, marca un punto de inflexión para un instrumento que había desaparecido casi por completo.
Longhi remarcó que “la mayor oferta de créditos y la posibilidad de acceso para más personas inciden de manera directa sobre el repunte de las operaciones. Además, empieza a circular más oferta inmobiliaria, y eso también dinamiza”.
Alejandro Braña, consultor especializado en mercado inmobiliario, coincidió con el diagnóstico. Señaló que el regreso del crédito —aunque aún limitado— genera movimiento sobre todo en sectores medios: “Hoy los bancos vuelven a ofrecer UVA, y eso permite que compradores que estaban fuera de juego por la falta de financiamiento puedan volver a competir”.
Según Braña, el impulso también responde a un reacomodamiento de precios tras años de caída: “En muchos segmentos los valores tocaron un piso real. Eso, combinado con un dólar más estable, empujó a concretar operaciones postergadas”.

En términos mensuales, marzo también superó con claridad a febrero, cuando se habían firmado 7.952 escrituras. El salto fue del 29,8%, lo que refuerza la percepción de una tendencia en alza.
Fernando Belvedere, titular de EFEBE Propiedades, explicó que la mejora se vio sobre todo en propiedades de dos y tres ambientes, en zonas urbanas con buena conectividad y precios entre USD 40.000 y USD 90.000. “Ese rango reúne a quienes compran para vivir, a inversores que buscan renta y a propietarios que venden para capitalizarse”, dijo.
Belvedere también señaló que el regreso del crédito reordenó las expectativas del sector: “Cuando hay financiamiento, la confianza mejora. No solo sube la demanda, también se activa la oferta y se reacomodan los precios. Muchos vendedores aceptaron ajustar valores para cerrar operaciones”.
Otra voz clave fue la de Mirta Líbera, presidenta de la Cámara Inmobiliaria de la Provincia de Buenos Aires (CIBA), quien vinculó la reactivación con una menor inflación y la calma cambiaria: “Ese contexto redujo la incertidumbre. Aun sin boom, se generó un clima más propicio para tomar decisiones de mediano plazo”.
Líbera aclaró que los créditos todavía no alcanzan a grandes masas, pero empiezan a marcar la cancha en algunos segmentos: “En los últimos meses se reactivaron operaciones impulsadas por líneas que favorecen a empleados bancarios o quienes tienen cuenta sueldo”.
Tipos de inmuebles
Además, destacó una reorientación de la demanda: “Hoy se prioriza la compra de unidades más accesibles. Las más buscadas son las de menor metraje, en barrios con buena relación entre precio, servicios y conectividad. Ahí se concentran tanto los que invierten como quienes buscan primera vivienda”.
Entre las operaciones realizadas en marzo, también crecieron las compras de departamentos en desarrollos cerrados y lotes con intención de construir en el año. Según Líbera, esto se explica por la percepción de que ahora es el momento de entrar, antes de una posible suba de costos.
En cuanto al crédito, Braña advirtió que su peso sigue siendo bajo frente a los niveles históricos: “Aún estamos muy lejos de lo que representó el primer ciclo de los UVA, en 2017 y 2018. Pero el cambio de clima es real, y si la macro lo acompaña, el crédito podría volver a ser protagonista”.

Por ahora, las escrituras con hipoteca son minoría, pero su aumento en términos interanuales es contundente. Entre marzo de 2024 y marzo de 2025 pasaron de 315 a 1.669, una suba de más del 430%. “Ese dato muestra que la herramienta empezó a recuperar espacio. El desafío ahora es sostenerlo con condiciones previsibles”, dijo Longhi.
En ese sentido, desde el Colegio de Escribanos también alertaron que la mejora depende de una estabilidad macro más amplia. “El mercado necesita reglas claras, tasas viables y continuidad institucional. Sin eso, cualquier recuperación es frágil”, señalaron fuentes del organismo.
Líbera agregó que la reactivación está aún lejos de niveles precrisis, pero representa una señal positiva: “El sector pasó años de estancamiento. Volver a hablar de repunte, aunque sea moderado, ya cambia el ánimo de toda la cadena”.
Con este telón de fondo, el sector espera que abril y mayo mantengan el ritmo de operaciones. Aunque la estacionalidad suele moderar la actividad tras el verano, este año la tendencia es distinta. “Hay una inercia positiva, con más consultas y reservas. Si la economía no vuelve a desordenarse, el segundo trimestre puede consolidar esta mejora”, concluyó Belvedere.
El mercado inmobiliario bonaerense se mueve. Después de años de caída, estancamiento e incertidumbre, marzo dejó una señal que el sector no quiere dejar pasar. La combinación de precios acomodados, dólar estable, reaparición del crédito y expectativas más racionales parece haber reabierto la puerta de entrada a un nuevo ciclo.